Querida Torre Effield:
He empezado a reunir un poco de dinero, de lo poco que tengo he guardado 10€ y así haré para poder verte.
De momento se que eres grande, muy grande y hecha de hierro, que principalmente te llamaban torre de 330 metros (tour de 330 mètres) y que nacistes en 1889 en París. Sé muy poco de ti, no sé como se tiene que ver París desde tus alturas, no se cómo pegará el viento o el sol, no sé cuántos metros tendré que mirar hacia arriba para poder verte entera. Algún día cuando tenga el dinero suficiente para ir a verte, sabré todo lo que es eso, sabré si el viento será freso o si el sol me picará en la piel, o cuantás fotos seré capaz de sacar desde las hemosas vistas que hay que aver desde ahí arriba.
Sólo se que algún día, podré verte y aqui estaré para contarte lo bonita que me pareces en persona en vez de en fotos.
